Martes, 10/08/2010
Con el claro objetivo de vengar el forzado renuncio de nuestros “compis” Vero y Richi semanas atrás -debido al cansancio y a la fuerte intensidad del sol- nos propusimos ver los Ibones de Remuñe. Salida algo tardía del camping de los Llanos de Senarta -centro neurálgico de nuestras excursiones- nos pusimos rumbo hacia el punto de salida de la cita de hoy. Una vez aparcados y con las mochilas preparadas, echamos la vista abajo y con sorpresa apreciamos la cantidad de gente que se disponía a coger el autobús que les acercaría a la Besurta.
Con el claro objetivo de vengar el forzado renuncio de nuestros “compis” Vero y Richi semanas atrás -debido al cansancio y a la fuerte intensidad del sol- nos propusimos ver los Ibones de Remuñe. Salida algo tardía del camping de los Llanos de Senarta -centro neurálgico de nuestras excursiones- nos pusimos rumbo hacia el punto de salida de la cita de hoy. Una vez aparcados y con las mochilas preparadas, echamos la vista abajo y con sorpresa apreciamos la cantidad de gente que se disponía a coger el autobús que les acercaría a la Besurta.
Saturación Pirenaica
Recorrido
Nada mas empezar nos encontramos con un fuerte desnivel -algo típico y ya acostumbrados por las excursiones con salida desde la carretera- y tras atravesar el bosque de abetos -llevándome algún que otro coscorrón y enganchón- llegamos al terreno cómodo. Seguimos andando por el sendero del valle de Remuñe. Hacia un calor asfixiante y apenas había sombras en toda la excursión, así que gracias al torrente de agua que nos acompaño durante gran parte de la ascensión permitió refrescarnos en numerosas ocasiones.